Editorial SM, colección Gran Angular, nº 21
Madrid 1981
Polonia- Alemania, 1944. La familia Bienmann ha de abandonar Jedilchen, un pueblo situado en Prusia Oriental, ante el avance de los rusos. Konrad, doce años, es el mayor de los hijos. El invierno es un personaje más en la huida.
En Año de lobos se denuncia uno de los dramas, quizá el peor, de los que sucedieron en la segunda Guerra Mundial: la pasividad de tantos ante las injusticias que sucedían alrededor. El padre de Konrad le cuenta cómo llevaron a los judíos a un campo de concentración cercano: «Sólo los muertos salen de allí. Todos lo sabían. Y nos callábamos. Nos sentimos contentos de no caer allí. Nuestro silencio es nuestra culpa, hijo».
Excelente novela en la que se narra la huida de una familia alemana durante la Segunda Guerra Mundial, cuando se acerca el final y las tropas soviéticas se aproximan a la zona en que viven los protagonistas. El dolor y la angustia de la huida están magníficamente descritos, pero también el amor y la solidaridad familiar y la fe en Dios. Una de esas historias difíciles de olvidar y que merece la pena leer tanto a jóvenes como a menos jóvenes.
Deja una respuesta