Esta Cuaresma, la hemos vivido como un viaje. Los viajes son siempre momentos de experiencia y, precisamente eso es lo que hemos hecho este año. Una experiencia de camino a través del evangelio de cada domingo y un gesto simbólico relacionado con él.
Comenzamos nuestro viaje el Miércoles de Ceniza. Ese día pudimos ser más conscientes de nuestro pecado, de esas ocasiones en las que no hacemos el bien y esto nos aleja de los demás y de Dios. Por eso, recordábamos que estamos llamados “a ponernos guapos”, a convertirnos, a transformarnos y a cambiar. Y para no olvidarlo nos pusimos colonia. Con este símbolo expresamos nuestra intención de crecer, de mejorar, a través del cambio de nuestras actitudes, de pequeñas acciones, detalles,… Si transformamos nuestro corazón, “oleremos bien”.
Cada semana de cuaresma continuamos nuestro viaje con el deseo de prepararnos bien para celebrar la Semana Santa y la Pascua de Resurrección. Estos son los símbolos que nos han ayudado en el camino:
Domingo primero
- Las tentaciones: Muchas veces llenamos el corazón de cosas que no nos hacen felices ni nos acercan a nuestro Padre Dios. Optamos por lo que más nos gusta, que no siempre es lo mejor.
- Símbolo: tiritas. Las tentaciones son como heridas que nos impiden cambiar, crecer,…
Domingo segundo
- Jesús: Nuestro Padre Dios nos ofrece lo que más quiere, su hijo Jesús. Si lo seguimos y nos parecemos a Él alcanzaremos la felicidad.
- Símbolo: GPS o mapa. A veces nos encontramos desorientados, no sabemos qué elegir.
Domingo tercero
- El mal del mundo: Jesús encontró el templo convertido en un negocio por interés de muchas personas.
- Símbolo: una pastilla de jabón para expresar nuestro rechazo al pecado.
Domingo cuarto
- Jesús es la luz: A veces a nosotros y a nuestra sociedad parece que nos gusta estar en la oscuridad y rechazamos la luz de Jesús, su salvación.
- Símbolo: Vela. Encenderemos una vela grande que representa a Jesús.
Domingo quinto
- “Morir” para “ganar”: El grano de trigo del evangelio es todo lo que somos y tenemos.
- Símbolo: Juego cooperativo. Morir a la oportunidad de ganar, destacar… a cambio de conseguir lo que plantea el juego.
Nuestro viaje, ya está llegando a su fin, estamos de lleno en la Semana Santa, a las puertas de la gran fiesta de Pascua de Resurrección.
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